martes, 22 de abril de 2014

Hacienda somos todos (excepto ellos)

“Hacienda somos todos”. ¿Recuerdan la campaña que contenía ese eslogan? Yo soy muy joven para acordarme; tanto que ni siquiera había nacido. Surgió en 1977, ideado por Francisco Fernández Ordóñez, ministro de Hacienda español de 1977 a 1979. Califican su reforma fiscal de auténtico éxito, y, entre otras cosas, fue quien introdujo el Impuesto sobre la renta.


Hablemos de la actualidad.

¿Ese eslogan podría extrapolarse a estas fechas? ¿Hacienda somos todos? No. Hoy en día Hacienda somos los que más hundidos estamos, los que tenemos que soportar las duras políticas que nos imponen. Somos nosotros quienes tributamos a Hacienda, quienes pagamos nuestros impuestos. ¿Quiénes no lo hacen? Los que están relacionados con la trama Gürtel, los políticos corruptos del Partido Popular, que se llevan sus sobres, sus sobresueldos y todo lo que tengan a paraísos fiscales como Suiza para evitar pagar impuestos en su propio país. Dando ese ejemplo, no son los más indicados para decirnos a la mayoría de los ciudadanos que tenemos que pagar nuestros impuestos. ¿Por qué? Si ni siquiera quienes nos gobiernan lo hacen.

Y son ellos, quienes más dinero tienen, quienes más deberían tributar, pero esto no es así por su egoísmo y porque su país en realidad les da igual. Si de verdad les importase su país a todos esos políticos, no evadirían su capital a paraísos fiscales mientras estamos en crisis, porque la corrupción política y financiera tiene gran parte de la culpa de esta situación. Les da igual su país, solo buscan su propio beneficio y no tienen miramientos a la hora de robar un poco más. Total, si ya estamos en crisis. Hacienda ya no somos todos.

Son ellos los que ya no forman parte de Hacienda (aunque debieran), los mismos que tienen coches 

oficiales, trajes pagados con dinero de dudosa procedencia, sobresueldos, pagas vitalicias y cuentas en Suiza. Son los mismos que les da igual si su país se hunde en la miseria o no; son quienes solo buscan su propio beneficio por encima de sus ciudadanos. Hay que tener poca vergüenza, muy poca vergüenza para conocer la situación del país, como hay gente viviendo en la calle, gente que no puede pagar, familias que no pueden alimentar a sus pequeños, estudiantes sin poder pagarse los estudios, gente sin casa y casas sin gente, el alto porcentaje de paro que existe y, aún así, robar todo lo que se pueda. Robar, porque es robar; una parte de ese dinero que los políticos corruptos evaden a paraísos fiscales corresponde a impuestos, y no los pagan. ¿Qué ejemplo es ese?

Así, no debemos extrañarnos de la actual crisis económica. Si el dinero sale fuera de España, la recaudación es menor. Sí hay dinero, pero está fuera de España, en aquellos lugares donde no se tributa a la Hacienda española, los impuestos son muy bajos o, simplemente, no hay impuestos.

José Manuel Sanz

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